Discurso Mario Martos:
“Frente a la Globalización ¡Defendamos España!” con este lema os convocamos a todos al acto que la Asociación Iberia Cruor realiza hoy sábado 27 de abril en la plaza de las protegidas.
La fecha de hoy no ha sido elegida por simple casualidad del destino, hemos considerado esta fecha como oportuna al estar cercana al primero de mayo. Y es que este primero de mayo no es uno cualquiera como el de años anteriores, este año el primero de mayo tiene un marcado carácter reivindicativo por el terrible momento económico, social y político que atraviesa nuestra nación y Europa en general en estos momentos.
Y que mejor lema para una concentración cultural en medio de la parafernalia política y sindicalista por el primero de mayo que el de “Frente a la Globalización ¡Defendamos España!”, seguro que ninguno de los partidos, sindicatos o movimientos sociales que se manifiestan estos días se acuerda de nuestra identidad.
Por eso hoy estamos aquí para gritar bien fuerte a los cuatro vientos que nos proclamamos como defensores de la identidad nacional.
Y es que la Globalización es la causa de que España sea un país sin industria dedicado única y exclusivamente al sector servicios, es decir al turismo.
La Globalización es la culpable de la perdida de nuestra soberanía, y esto conlleva a la deslocalización de la industria española a favor de terceros países donde ni siquiera se respetan los derechos humanos, es también la culpable de que en España la agricultura no funcione favoreciendo la de terceros países como Marruecos. Que en grandes superficies comerciales españolas los productos agrícolas vengan desde el norte de África, de Sudamérica, e incluso desde Israel, además de de por culpa de unos empresarios poco patriotas y explotadores el principal causante es la Globalización.
Para luchar contra la Globalización es necesario lo primero de todo recuperar la soberanía nacional, para primero crear una economía nacional que sea fuerte y competitiva, con una industria y una agricultura como fuerza principal del crecimiento económico.
¿Por qué nos proponemos el tema de identidad nacional frente a la sociedad global?
Comprendemos que uno de los principales enemigos de España como nación a día de hoy a parte de los separatismos locales son los espacios de libre comercio, los movimientos migratorios, las instancias supranacionales al servicio de los grandes intereses de entes financieros y la desarticulación paulatina del aparato del Estado.
De ahí la celebración de este acto. En este día reivindicamos de donde procedemos, aquello que hemos sido y que somos, y sobre todo, aquello que no podemos perder, que no podemos dejar morir a manos de los intereses de la globalización.
Y que esperemos sirva para despertar conciencias, para que todos nosotros seamos conscientes de la importancia de luchar para que en 40 o 50 años podamos seguir hablando de España como aquello que desde hace siglos ha sido; una de las naciones más ricas en cultura, diversidad e historia de todo el mundo, una nación que en hermandad con el resto de países europeos tiene que configurarse como baluarte de resistencia ante ese proceso criminal que representa la sociedad global.
Hoy aquí queremos hacer referencia a dos cosas por una parte el peligro que para los estados nacionales supone el avance del perverso proceso globalizador al que asistimos en nuestros días. Y por otra parte, la necesidad de resucitar el fenómeno nacional.
Tarea, sin duda alguna, ardua y complicada. Mucho más en unos momentos de estupidización generalizada y egoísmo ciego como los que vivimos.
Y es que es misión prácticamente imposible pedir sentimiento y amor por la patria a quien no alcanza a ver más allá de los bienes materiales que posee y de su propio bienestar. Igualmente complicado es pediros que tengáis fe en una juventud a la que mientras impiden el acceso a una vivienda digna y pagan salarios míseros, responde convocando macro botellones.
La situación, siendo fríos, es bastante descorazonadora. Sin embargo, no hay más opción que sacar fuerzas de flaquezas, esbozar una sonrisa y dar todo lo mejor de nosotros para que esta gran nación no perezca a manos de los procesos de cambio más infames de la historia y vuelva a ser lo que un día ya fuimos, una gran nación de donde las haya.
Además, estoy seguro que aún queda algo de coraje entre nosotros. Quien sienta como suyos los bosques y mares contaminados por la locura comercial e industrial, quien sienta en su pecho el dolor de ver una nación invadida de mezquitas y Burguer Kin´s, quien se emocione al escuchar la oda al dos de mayo de Bernardo García López, no necesita más motivación que esa para seguir adelante.
Por eso, la recuperación y defensa de la nación es una labor que no puede correspondernos más que a nosotros. Y por eso mismo, es de vital importancia que desde hoy nos concienciemos de que nuestra lucha apunta en una dirección muy clara; la defensa de la identidad española frente a la globalización, frente a los separatismos locales y la unidad nacional.
Esa ha de ser la idea que guíe nuestros pasos y nuestra actuación.
Y hoy aquí desde el recuerdo más sincero queremos honrar desde los héroes de Numancia, a Don Pelayo, El Cid, los Reyes Católicos, los Conquistadores, Blas de Lezo, el pueblo madrileño del 2 de mayo, a José Antonio y Ramiro Ledesma para que más de cinco siglos después podamos seguir orgullosos de pertenecer a esta nación por eso, ahora más que nunca.
¡Adelante por España!