jueves, 22 de octubre de 2009

Crisis, crisis, crisis....


España sigue atravesando unos momentos difíciles, en los que parece que la crisis no ve el final. La oposición sigue sin saber bien donde situarse y con sus graves problemas de corrupción; los sindicatos siguen estando en contra de los empresarios, culpando a estos de los problemas de la crisis, mientras que los trabajadores sufren esta crisis los líderes sindicales españoles culpan a los empresarios, anunciando que se movilizaran antes de que finalice el año contra ellos; por otra parte se encuentran los empresarios empeñados en el despido barato y libre y en que sus beneficios no mermen; otra de las partes implicadas es el gobierno que haciendo oídos sordos a los principales problemas sociales y económicos de los españoles sigue en su cruzada de convertir en España a el país más progresista de todo el mundo poniendo como excusa que la legislación europea esta muy por encima de nosotros en progreso cuando todos sabemos que eso no es cierto, mientras que a nuestro gobierno progresista parece que se le olvida que en materia de educación dicho por todos los expertos europeos nos encontramos a la cola, ¿por qué nunca se habla en este país de la educación? será porque quieren un pueblo de imbéciles e incultos que mermada su voluntad de decisión obedezcan los mandatos progresistas.

Y por último nos encontramos el pueblo español que somos los que sufrimos sus consecuencias, con una tasa de paro que pasa de sobra los 4 millones de parados, con una subida de impuestos gravísima, con una falta de inversión en las PYMES impresionante y con un largo etc., nos preguntamos por que los españoles no nos encontramos en las calles denunciando esta situación.

Parece que como vemos el gobierno de ZP no lo ha hecho tan mal como parece, los valores del progresismo barato han sido implantados ya en la sociedad española, en los momentos difíciles donde se ven los buenos hombres vemos como cada posición implicada va en una dirección distinta haciendo gala de ese individualismo egoísta implantado por el progresismo carca y barato.

Nosotros seguiremos siendo esa disidencia juvenil que hará frente al progresismo barata de hoy en día, donde frente a su individualismo egoísta nosotros abogaremos siempre por nuestro idealismo y por la unidad del pueblo.