lunes, 15 de junio de 2009

España no es esto, España se ha ido.

Esta es una carta recibida por nuestra asociación por un anónimo, en la cual reflexiona acerca de la actual situación de España.

Un día raro como es el de hoy, nublado en Junio, salía de la cafetería de mi trabajo oyendo hablar de elecciones, de ganadores, de perdedores, de miles de votantes...de España, y cuando he escuchado ese nombre que tanto respeto me a inspirado, y tanto sentimiento imposible de disimular...me he quedado absorto en mis pensamientos y me he sorprendido a mi mismo diciéndome que España no es esto...mientras subía al poco rato a la azotea de mi edificio me e vuelto a sorprender mirando a la Sierra Madrileña, imaginándome tratando de reconquistar España a los musulmanes o me he imaginado en Galicia hablando a mis nietos de meigas, o siendo un Almogávar en Cataluña o incluso me he embarcado en una carabela cruzando el océano atlántico sin saber a ciencia cierta si el mundo era aun redondo o si acababa en una inmensa cascada como se decía...
Después de haber hecho las Américas me fui a Flandes con mi Tercio Viejo, peleando con mi arcabuz y mirando a los lados para ver las caras de respeto con las que nos miraba media Europa cuando pasábamos los españoles. Luego me vi a mi mismo abrazando a mi madre mientras ella lloraba desconsolada, diciéndome que estaba orgullosa de mi, que por favor tuviese mucho cuidado en el frente del Este con la División Azul, yo sabría más tarde que mi padre no había venido a despedirse de mi porque hombre entre hombres no quería llorar en la estación.
Cuando subía al tren volví a coger esta extraña maquina del tiempo que solo se encuentra en mi cabeza y de inmediato reconocí donde estaba, en que fecha y lo que a mi alrededor estaba aconteciendo, estaba en Numancia y mirando por encima de las murallas veía dominante al general romano Publio Escipión orgulloso y arrogante sin saber que dentro de las murallas la ciudad entera después de ocho meses de hambruna por el asedio, se estaba suicidando antes que rendirse...
Volví a la realidad por escuchar a dos coches pitándose y tras tomar una bocanada de humo de nuestra ciudad, volví al trabajo sabiendo que España se ha ido para no volver.

Anónimo